«Erase una vez un día que alguien decidió llamar Navidad:
Los 364 días restantes de cada año lo miraban desde fuera con envidia, por que era un día reluciente, luminoso, las calles estaban llenas de luces, la gente se reunía con su familia mas lejana, se hacían cosas que los otros días del año eran sorprendentes.
Ese día se mandaban mensajes tiernos, se tenia la casa mas caliente, se pensaba en personas que en el resto del año no te dabas permiso para pensar, hablabas con tu conciencia, hacías balance de como estabas, pensabas en amigos que ese año ya no estarán contigo, las personas se reunían con familiares que solo veían ese día.
Era un día que tenia color blanco brillante, sabor a mazapán y cava, olor a cena familiar con conversación, sonido a campanillas de trineo y el tacto a terciopelo del gorro de Papa Noel.
¡¡Ese día lo tenia todo!!
El resto de los días del año estaban muy enfadados con el, por que cualquiera de ellos no tenia ni una centésima parte de celebridad de que el. Así que decidieron hablarlo con el día Navidad y decirle que repartiera su fama entre todos los demás.
El día de Navidad se quedo muy sorprendido, quedaba muy, muy poco para ser su gran día y estaba en su despacho organizando su agenda.
Cuando vio a la puerta de su casa a los 364 días, con parcantas que ponían «Fuera Navidad» «Abajo los Privilegiados» «Oportunidad para todos» y gritando su nombre…tuvo MIEDO (¿Y quien no?). Miro para arriba y pidió su regalo de Papa Noel, Sabiduría en las palabras, y de repente ese deseo formulado desde el corazón, le dio coraje para salir y hablar con sus 364 hermanos.
El ambiente estaba encendido, olía a pólvora y el color rojo lo envolvía…con su color blanco salió Navidad y todos callaron.
Y Navidad hablo: ¡¡Os ofrezco mi día!! ¿Quién quiere ser Navidad? ¡¡Dimito!!
Los 364 días callaron
Y Navidad pregunto:
– ¡¡Tu 3 de Julio!! Cámbiate por mi
y ese día dijo ¡¡Uff dejar el calor, los baños de mar, los días largos, las cervecitas en las terrazas..va a ser que no!!
– ¡¡Tu 1 de Octubre, ven y ocupa mi puesto!!
Y este pensó…Jo!! Con lo que me gusta el color rojizo del otoño, los atardeceres, ver a los niños que van al cole, ¡¡No y no!! ¡Yo lo mío no lo dejo!!
¡¡Y así uno a uno fue preguntando, y su sorpresa fue que no encontró candidato al cambio…se quedo solo en su presidencia del día de Navidad.
Entonces el pensó..¡¡Uff!! Cuanto trabajo me queda, cuanta responsabilidad tengo, y estoy solo, y una soledad le impregno
Mientras tanto vio como cada día del año se colocaba de nuevo en su lugar del calendario y los 364 días sacaron la cabecita del calendario y con una gran sonrisa lo saludaron y le dieron las GRACIAS por estar allí, en el lugar que le correspondía y hacer lo que tenia que hacer, por que de esa forma ellos se habían dado cuenta que por reflejo de Él sabían que estaban haciendo lo que tenían que hacer y en el lugar que tenían que estar.
Y colorín colorado este cuento acaba con la Sabiduría Cósmica sonriendo…un nuevo año todo estaba en el orden que debía estar
Y yo me pregunto ¿Qué cualidades puedo desarrollar para ser yo Navidad? Aceptación, Empatía, Confianza, Tolerancia, Apertura, reconocimiento…
Te agradezco a ti que estas leyendo estas líneas este recorrido conmigo, a los que me habéis escrito, a los que me habéis leído, a los que vienen a mis clases, a todos los que me habéis rozado y acariciado este año, con palabras, gestos, o sabiendo que estáis allí.